top of page

Espectáculo de la Naturaleza: El Glaciar Perito Moreno



Hay viajes y experiencias que marcan un hito en tu vida, y para mi ver el Glaciar Perito Moreno en Argentina fue una de las mejores. Es un lugar impresionante que la naturaleza ha creado y que está ahí, para que todos la admiremos. Es un viaje que hay que hacer, aunque sea una vez en la vida. De hecho, estoy deseando volver.


El Glaciar se encuentra en el Parque Nacional los Glaciares, ubicado en la Provincia de Santa Cruz, Patagonia Argentina, que comprende un escenario de montañas, lagos y bosques, incluyendo una vasta porción de la Cordillera de los Andes prácticamente cubierta de hielo y nieve al oeste y la árida estepa Patagónica al este. Debe su nombre a la presencia de numerosos glaciares que se originan en el gran Campo de Hielo Patagónico -el manto de hielo más grande del mundo después de la Antártida- el cual ocupa casi la mitad del Parque. También conocido como Hielo Continental Patagónico, alimenta 47 grandes glaciares, pero existen más de 200 glaciares de menor magnitud. Si bien las grandes masas de hielo suelen encontrarse en nuestro planeta a más de 2500 metros sobre el nivel del mar (msnm) los glaciares de la provincia de Santa Cruz tienen su origen a solo 1500 msnm de altitud y descienden hasta los 200 msnm, permitiendo un acceso y visualización única en el mundo. El glaciar más famoso (y visitado) es el Perito Moreno, cuyo nombre hace honor a Francisco Moreno, activo explorador de la zona austral de ese país.


Para llegar a este Parque, debes viajar hasta el pueblo El Calafate, a 3 horas y media en avión desde Buenos Aires. Nosotros incluimos El Calafate como parte de nuestra ruta por Argentina y llegamos desde Ushuaia. Viajamos en agosto, en pleno invierno, porque nuestra idea era disfrutar la nieve y el frio. Creo que es la mejor época para ir al Sur de Argentina. Como dato te digo que si viajas en vuelo internacional hasta Buenos Aires por Aerolíneas Argentinas los viajes internos te salen muy baratos. Otro dato: asegúrate un asiento en la ventana del avión para que puedas maravillarte con la belleza del sistema montañoso de Los Andes.



El Calafate es un pueblo pequeño, al borde del Lago Argentino, uno de los más grandes de Suramérica. Cuenta con 4000 habitantes y es el centro de toda la actividad turística relacionada con los glaciares. A pesar de ello, no nos pareció una ciudad cara, al contrario. El pueblo toma su nombre del pequeño arbusto Calafate, típico del sur de la Patagonia. Este fruto es una baya parecida a los arándanos y se utiliza mucho en la preparación de dulces. Según la tradición, quien come calafate alguna vez regresará por más. En realidad, yo creo que quien conoce El Calafate no quiere irse jamás después de ver su vecino más famoso: el Perito Moreno.


Desde El Calafate parten todas las excursiones organizadas y encuentras muchas agencias de viajes que organizan paseos y excursiones hasta los glaciares. La visita al Perito Moreno se puede realizar de tres maneras: puedes admirarlo desde el mirador ubicado en frente, puedes acercártele navegando en un catamarán que se acerca lo más posible a las paredes de hielo o puedes verlo (y sentirlo) muy de cerca en una excursión de trekking que permite caminar sobre el hielo. Por supuesto, cada una de estas excursiones es más cara que la anterior.


Nosotros decidimos hacer la excursión por nuestra cuenta y alquilamos un automóvil pequeño (son viejos no esperes grandes lujos) en el mismo aeropuerto al llegar. Sin embargo, ahora en perspectiva, yo hubiera dedicado un día más para hacer la excursión del trekking que va por encima del glaciar, creo que nos perdimos una gran experiencia que no debe poder hacerse en muchos sitios del mundo y debe ser una sensación única (volveremos, ya tenemos excusa)


Visitando el Glaciar Perito Moreno


Para llegar al Perito Moreno la distancia desde El Calafate son 80 km de carretera, una hora y media. El recorrido se inicia bordeando el margen sur del Lago Argentino y a los 48 km del recorrido llegarás a la entrada del Parque Nacional Los Glaciares, donde se abona el arancel de ingreso. A medida que se avanza, el clima y la flora revelan la transición entre la estepa y el bosque patagónico. El camino prosigue bordeando el Brazo Rico del Lago Argentino.


Seis kilómetros antes de llegar a destino, luego de una curva ascendente se llega a un mirador con la primera vista panorámica del glaciar, lugar conocido como “La Curva de Los Suspiros”. Este mirador tiene espacio suficiente para estacionar el vehículo para contemplando la grandiosidad del glaciar Perito Moreno y los cerros adyacentes. No dejes de levantar la vista de vez en cuando al cielo para ver si tienes la suerte de encontrar un cóndor, el ave más representativa de Los Andes.


Finalmente, llegas al Mirador del Perito Moreno, que alberga todos los servicios necesarios para los turistas y desde donde se ingresa a las pasarelas. Las mismas están dispuestas formando un circuito de tres niveles, con escalinatas y balcones que permiten apreciar el glaciar desde diversas perspectivas.


Cuando te encuentras frente al Perito Moreno te quedas con la boca abierta. Es fabuloso. Imponente. Un manto de hielo, o casquete glaciar, con una longitud de 30 km., un frente de 5 km. y una altura de 70 metros. No nos cansamos de admirarlo desde uno y otro lado.


Además, te encuentras con otra sorpresa para tu disfrute: el sonido del hielo al romperse, desprenderse, caer al agua, un estruendo que retumba a lo lejos porque el silencio que reina, y luego observarlo transformado en maravillosos témpanos flotantes. Otras veces lo que suena es el hielo resquebrajarse por dentro, debido a que el Perito Moreno es uno de los glaciares que más rápido avanza del mundo, a una velocidad de avance de 1,7 m. diarios en el frente y 0,45 m. en los bordes. Así que la experiencia se convierte en un verdadero espectáculo de la naturaleza con efectos especiales incluidos (en serio, tengo que volver).


El mayor espectáculo es la llamada Gran Ruptura. Gracias a su constante avance, el glaciar forma una represa con las aguas del brazo Rico de dicho lago, lo cual genera un desnivel con respecto al resto del lago de hasta 30 m. Por la presión de esta masa líquida se producen filtraciones en el hielo que crean un túnel con una bóveda de más de 50 m de altura. El derrumbe de este puente por su peso constituye un inusual espectáculo natural más o menos cada cuatro años. La última fue en 2016. En esta foto de nuestra visita (2012) se puede ver el arco roto:


Nuestra estancia fue más larga de lo previsto, dada la belleza del lugar. Después de estar casi dos horas recorriendo las pasarelas, paseando, sacando fotos y esperando las rupturas, fuimos a almorzar al restaurante del lugar para emprender el regreso a nuestro hotel. Pero, cuando ya habíamos terminado y descansado no pudimos irnos, decidimos volver bajar para seguir el proceso de contemplación. Es que es maravilloso y la visita te sabe a poco. Pero al final de la tarde no tuvimos más remedio que regresar (tengo que volver, creo que ya les dije).


Visitando El Calafate


Dedicamos un día a recorrer el pueblo. Ubicarse en El Calafate es muy fácil. La Avenida del Libertador San Martín es la principal y divide al pueblo en dos: una parte entre esta avenida y el Lago Argentino y otra hacia el sur, hasta las laderas de las montañas. Toda la actividad se desarrolla en esta avenida principal: allí encuentras restaurantes, tiendas de todo tipo, souvenirs y productos regionales, dulcerías, cafés, agencias de turismo, y todo lo necesario para el turista en general.


Pasamos la tarde en el Paseo Costero que bordea el Lago Argentino y llegamos hasta Puerto Bandera que es donde se une el Canal de los Témpanos (que viene de la zona de los glaciares) con el Lago y donde tuvimos la suerte de ver pasar numerosos témpanos de hielo desprendidos de los glaciares en su camino al Lago.


Y así concluyó este viaje a esta maravilla de la naturaleza. De esos viajes que nunca se olvidan, de los que le hablas (y recomiendas) a todos y donde seguramente habremos de volver algún día.


¿Qué comer en El Calafate?


Casi todos los restaurantes están en la avenida Libertador. La especialidad de El Calafate, como en toda la Patagonia, es el cordero patagónico echo “al asador”. Así que nos fuimos a probarlo al Restaurant más famoso de la ciudad “La Tablita” y no nos defraudó. Se los recomiendo


Las pizzas en toda Argentina son también buenísimas gracias a la gran cantidad de inmigrantes italianos que llegaron al país el siglo pasado. Probamos unas en la Pizzería La Lechuza que estaban tan buenas que a pesar del tiempo todavía nos acordamos de ellas.


No dejes de probar las especialidades que incluyen calafate. El helado está riquísimo, pero también hacen repostería, mermeladas, dulces y licores.






Escríbeme
 
viajarycelebrar@gmail.com
 
Me encantará conocer
tus opiniones y comentarios. 
 
bottom of page